Centro Apostólico Nuestra Señora de la Reconciliación: El Papa Juan Pablo II

jueves, 29 de mayo de 2008

El Papa Juan Pablo II

"Vale la pena dedicarse a la causa de Cristo"
"Vale la pena trabajar por una sociedad más justa"

1 comentario:

GonzaloParra30 de mayo de 2008, 21:29
Muy bueno, vale la pena dar todo por los demás. Sí lo vale.
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El Papa BXVI a los jóvenes

“Con amor y convicción os repito, jóvenes aquí presentes, y por medio de vosotros, a vuestros coetáneos del mundo entero: ¡No tengaís miedo, Cristo puede colmar las aspiraciones más íntimas de vuestro corazón! Nada ni nadie podrá jamás separarnos del amor de Dios”
“¡Id, queridísimos jóvenes, a vuestros ambientes de vida, a vuestras parroquias, a los barrios más difíciles, a las calles. Anunciad a Cristo Señor, esperanza del mundo! Cuanto más el hombre se aleja de Dios, su Manantial, más se pierde a sí mismo, la convivencia humana se vuelve difícil y la sociedad se desmorona. Permaneced unidos entre vosotros, ayudaos a vivir y a crecer en la fe y en la vida cristiana, para poder ser testigos valientes del Señor”.
“Cada uno de vosotros, queridos jóvenes, si permanece unido a Cristo y a la Iglesia puede cumplir grandes cosas”.
“Si un joven descubre los verdaderos y grandes valores nunca envejece”
“La bondad y la generosidad mantienen la verdadera juventud en los corazones, a pesar de los años que pasan velozmente”

El Papa BXVI a las familias

“¡Por favor, vayan con sus hijos a la iglesia y participen en la celebración de la Eucaristía dominical!”
“El Domingo se hace más hermoso, la semana se hace más hermosa, cuando van a Misa dominical juntos”
“El amor, entrega y fidelidad de los padres, así como la concordia en la familia, es el ambiente propicio para que se escuche la llamada divina y se acoja el don de la vocación”
Los padres son los primeros evangelizadores de los hijos
" todos los pueblos, para dar un rostro verdaderamente humano a la sociedad, no pueden ignorar el bien precioso de la familia, fundada sobre el matrimonio."
“la familia fundada en el matrimonio” que “constituye un ‘patrimonio de la humanidad’, una institución social fundamental; es la célula vital y la base de la sociedad y esto interesa a los creyentes y a los no creyentes”